Si estás buscando devolverle la vida a tu cabello de forma natural, quiero contarte sobre una de mis aliadas favoritas: nuestra mascarilla capilar. La uso al menos una vez a la semana, y créeme, ¡se nota la diferencia desde el primer uso! Pero lo mejor no es solo el brillo o la suavidad inmediata… lo más bonito es que, con el tiempo, te vas a olvidar de que tuviste el pelo dañado alguna vez.
Formulada especialmente para cabellos normales a secos. Es delicada, sin aromas artificiales, sin tóxicos y, por supuesto, sin envases plásticos. Su envase de vidrio de 100 gramos no solo es reutilizable, sino que también conserva de mejor forma los ingredientes activos.
¿Qué hace única a esta mascarilla capilar?
Aporta brillo y suavidad al instante
Con el uso constante, repara y nutre profundamente
Libre de ingredientes tóxicos y aromas artificiales
Sin plásticos y respetuosa con el medio ambiente
Ingredientes clave:
Aceite de palta, oliva y coco, ultra nutritivos y reparadores
Keracyn, un activo botánico que protege la fibra capilar del daño
Aceites esenciales que además de perfumar de forma natural, estimulan y relajan
Lo que más me gusta es que es fácil de usar, aplica de medios a puntas, sobre el cabello limpio y húmedo. Déjala actuar mínimo 15 minutos, según el tiempo que tengas. Puedes potenciar el efecto usando una toalla tibia. Luego enjuaga y disfruta del resultado.
Consejo:
Usa la mascarilla capilar una vez por semana como tratamiento intensivo, o dos veces si sientes el pelo muy reseco o castigado. Para mejores resultados acompáñala con nuestro Shampoo y acondicionador RESTAURACIÓN.
Con esta mascarilla, estás nutriendo tu pelo y también eligiendo cuidar el planeta.
¿Ya la tienes en tu rutina? Si no, te invito a probarla. Tu pelo —y tu conciencia ecológica— te lo van a agradecer.
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